Hoy veremos.....
¿Ya era hora, no?. Por fin me apetece sentarme un rato a explicaros a todos como me va por aquí y todas las cosas que he vivido y descubierto estos días.
Ya llevo en Sapporo 5 días y, aunque las cosas al principio fueron un pelín agobiantes, parece que todo va serenándose y empiezo a sentirme mucho más a gusto.
Voy a contaros en esta primera entrada de "Crónicas desde el otro he-lado del mundo" (Vicentes, espero vuestras críticas al título de mi parte del blog) cómo fue mi aterrizaje aquí.
El viaje no se me hizo muy largo, aunque sí que acabé bastante cansado.
Nada más empezar en el aeropuerto de Manises, iba con la tensión de saber cuánto iba a tener que pagar por exceso de equipaje. Máximo permitido por la compañía: 20 kg en equipaje facturado y 12 en equipaje de mano. Mis maletas pesaban 25,5 y 14kg respectivamente, pero es lo que tiene venir a una ciudad donde a 5 de Abril aún hay nieve por las calles. De pueblos dejados de la mano de Dios como Bronchales o la Yesa me lo esperaba, pero esto es Japón macho.
Al final, como iban con retraso facturando, no me hicieron pagar nada y me dijeron que mis maletas irían directamente a Sapporo.
En París no tuvimos problemas para cambiar de terminal aunque sólo tuviéramos 2 horas para hacerlo, aunque la compañía de viajes se hizo un lío y Pablo y yo acabamos cada uno en una punta del avión.
El avión era un Airbus tochísimo con todas las comodidades que cualquier persona necesita, es decir: posibilidad de jugar a videojuegos en la pantalla de tu asiento, ver películas y ver capítulos de Friends.
Mireia, me alegra comunicarte que por fin vi "Up in the air" en Versión Original (y no porque la viera en inglés, si no porque realmente la vi "Up in the air", ¿dónde está el emoticono del redoble de tambores cuando lo necesitas?).
Al llegar a Tokyo habían un par de azafatas esperando a la salida del avión con un cartel con mi nombre. Me dijeron que mis maletas no podían ir directamente desde Narita a Sapporo, así que tuve que ir a por ellas. Ojito con la atención al cliente, en España me dicen que "creemos que irán directamente a su destino" y en Japón vienen a informarme a mí personalmente de que tengo que recoger la maleta. España 0 - Japón 1.
En Narita me despedí de Pablo después de su Epic Fail (que él contará) y empecé la aventura en solitario. Facturé de nuevo las maletas y de nuevo me libré de pagar sobrepeso, y eso que ahora tenía que facturar también la de mano. Esperé 5 bonitas horas y aguanté un viaje de casi 2 con la azafata informando de cualquier cosa que pasara en el avión (cada 5 minutos tenía que coger el micrófono) y llegué con un montón de nervios y otro montón de sueño al destino final, ese que me lleva esperando desde hace ya un año, la ciudad del invierno interminable y el verano de 1 :semana de duración: Sapporo.
Así que, ¿qué es lo mejor que te puede pasar cuando llegas hecho puré a tu destino, con los nervios acumulados durante 26 horas de viaje y con ganas de meterte en la cama aunque sea la 1 del mediodía?. Pues que nada más aterrizar veas algo que sólo puedes ver aquí.
Voy a contaros en esta primera entrada de "Crónicas desde el otro he-lado del mundo" (Vicentes, espero vuestras críticas al título de mi parte del blog) cómo fue mi aterrizaje aquí.
El viaje no se me hizo muy largo, aunque sí que acabé bastante cansado.
Nada más empezar en el aeropuerto de Manises, iba con la tensión de saber cuánto iba a tener que pagar por exceso de equipaje. Máximo permitido por la compañía: 20 kg en equipaje facturado y 12 en equipaje de mano. Mis maletas pesaban 25,5 y 14kg respectivamente, pero es lo que tiene venir a una ciudad donde a 5 de Abril aún hay nieve por las calles. De pueblos dejados de la mano de Dios como Bronchales o la Yesa me lo esperaba, pero esto es Japón macho.
Al final, como iban con retraso facturando, no me hicieron pagar nada y me dijeron que mis maletas irían directamente a Sapporo.
En París no tuvimos problemas para cambiar de terminal aunque sólo tuviéramos 2 horas para hacerlo, aunque la compañía de viajes se hizo un lío y Pablo y yo acabamos cada uno en una punta del avión.
El avión era un Airbus tochísimo con todas las comodidades que cualquier persona necesita, es decir: posibilidad de jugar a videojuegos en la pantalla de tu asiento, ver películas y ver capítulos de Friends.
Mireia, me alegra comunicarte que por fin vi "Up in the air" en Versión Original (y no porque la viera en inglés, si no porque realmente la vi "Up in the air", ¿dónde está el emoticono del redoble de tambores cuando lo necesitas?).
Al llegar a Tokyo habían un par de azafatas esperando a la salida del avión con un cartel con mi nombre. Me dijeron que mis maletas no podían ir directamente desde Narita a Sapporo, así que tuve que ir a por ellas. Ojito con la atención al cliente, en España me dicen que "creemos que irán directamente a su destino" y en Japón vienen a informarme a mí personalmente de que tengo que recoger la maleta. España 0 - Japón 1.
En Narita me despedí de Pablo después de su Epic Fail (que él contará) y empecé la aventura en solitario. Facturé de nuevo las maletas y de nuevo me libré de pagar sobrepeso, y eso que ahora tenía que facturar también la de mano. Esperé 5 bonitas horas y aguanté un viaje de casi 2 con la azafata informando de cualquier cosa que pasara en el avión (cada 5 minutos tenía que coger el micrófono) y llegué con un montón de nervios y otro montón de sueño al destino final, ese que me lleva esperando desde hace ya un año, la ciudad del invierno interminable y el verano de 1 :semana de duración: Sapporo.
Así que, ¿qué es lo mejor que te puede pasar cuando llegas hecho puré a tu destino, con los nervios acumulados durante 26 horas de viaje y con ganas de meterte en la cama aunque sea la 1 del mediodía?. Pues que nada más aterrizar veas algo que sólo puedes ver aquí.
Japón 2 - España 0. No hay nada más que decir.
jajajaja, q bueno!!! me encanta el avión, y el redoble con lo de "up in the air" ha sonado en mi cabeza!! jajajaja, telepatía desde el otro helado del mundo!! jeje
ResponderEliminarte seguiremos leyendo!!! q vaya todo bien!! besets
Compro he-lado del mundo¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarVaya suerte con las maletas!!! Me alegro de que todo fuera bien.
ResponderEliminarSólo una cosa que objetar...¿¿¿La Yesa = pueblo dejado de la mano de Dios??? Para nada!!! jajaja.
Por cierto Javi, he vuelto a ITENE y te comunico que... pienso ocupar tu mesa!!!
Me encanta el avión!!! Aunque es una pena que hayas visto lo más chulo de Japón nada más aterrizar :P
ResponderEliminarSólo puedo una cosa decir: hombres gustan salmones, y oso gustan salmones; por eso osos comer personas. Sapporo FTW!!!!!
ResponderEliminarPredica la kimi-no-kotoba ;)
Soy EDu!!!!Lamentable la atencion al cliente!!!Pero bueno lo importante es que ya estas alli!!Cuidado con las Japonesas y el manga que Loli y yo pensamos que no vuelves!!!!Un abrazo crack!!!ahh espero que hayas visto el partidazo de MESSI!!PIM PAM!!!
ResponderEliminarHola Edu.
ResponderEliminarClaramente no he visto el partido del Barça porque los mandamases de la champions no piensan en que tendría que levantarme a las 3 de la mañana para verlo.
Eso sí, el partido del milenio no me lo pierdo. He conocido a un japonés fan del manchester city y a un taiwanés del United y lo veremos juntos seguramente.
Me alegro que estéis todos juntos en ITENE otra vez.
Bueno, ya estás allí! Me alegro que todo esté yendo bien y, lo más importante, que te libraras de pagar!! jajaja. Cuidate.
ResponderEliminarRamentable
ResponderEliminarMe alegro de que haya ido todo bien!! ya has encontrado la cocina? al final estaba entre la cama y la pared? o debajo de la alfombra?
ResponderEliminarTen cuidado que en La Yesa estan creando una plataforma en contra tuya por difamación. Ya cuentan con el respaldo de... 3 personas. Estan intentando convencer a los otros 2. Seguiremos informando
Olé, olé, y olé. ¡Ese es nuestro Javi! Ese es el espíritu, no achantarse ante nada que total un invierno cuasi-eterno no es para tanto. ¡Maldita sea, allí seguro que no! Si pudiera ir te propondría un combo Hokkaidou-Okinawa... Ay, quién pudiera...
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